
Cómo se gestó la caída de dos contrabandistas del barrio La Bianca y de una conocida comerciante de calle Balcarce
Tal como informara a Concordia Policiales, el pasado martes 11 de marzo, la Delegación de Inteligencia Criminal e Investigaciones de la Prefectura Naval Argentina (PNA) en Concordia a cargo del prefecto Jorge Ribinski, llevó a cabo diez allanamientos simultáneos en las provincias de Entre Ríos y Misiones. El objetivo de estos operativos fue desarticular una organización criminal dedicada al contrabando de mercancías extranjeras.
Las intervenciones ordenadas por el Juzgado Federal de Concordia, se centró en desmantelar una red que introdujo productos de origen paraguayo sin el correspondiente control aduanero. La organización tenía su base de operaciones en Misiones y extendía su actividad a diversas ciudades, incluyendo Concordia, Herrera y Concepción del Uruguay.
Investigación y modus operandi
La investigación se inició en octubre de 2023 a raíz de una denuncia anónima. Desde allí, personal de la Prefectura comenzó un exhaustivo trabajo de inteligencia, que incluyó escuchas teléfonicas, logrando establecer el funcionamiento de la red delictiva.
El circuito comenzaba en Ciudad del Este, Paraguay, donde los integrantes de la banda adquirian mercadería, inicialmente neumáticos, pero que luego diversificaron a teléfonos móviles, prendas de vestir, cigarrillos y productos electrónicos. Desde allí, los productos eran trasladados a Encarnación y luego a Misiones, desde donde eran enviados en encomiendas o transportados en vehículos particulares hasta depósitos en Entre Ríos. Finalmente, la mercadería era distribuida y comercializada en distintas localidades.
Los cabecillas y su vínculo con un comerciante local
En Concordia, la organización estaba liderada por dos hermanos del barrio La Bianca, Joaquín y Víctor. Uno de ellos se encargaba de ingresar la mercadería a la ciudad, mientras que el otro actuaba como “bagayero”, trasladando los productos de contrabando hacia Uruguay.
Además, la organización abastecía a una reconocida comerciante de calle Balcarce, conocida como “La Chela”. En su local, Prefectura incautó una gran cantidad de productos de origen paraguayo que carecían de la documentación legal correspondiente.
Secuestro y consecuencias legales
Durante los allanamientos, se logró el secuestro de mercadería valuada en más de $122.000.000 . Todo lo incautado quedó a disposición del Juzgado Federal, y posteriormente pasó a la Administración de Recursos de la Comunidad (ARCA), organismo encargado de su donación o destrucción según corresponda.