
Jueces de Faltas de Entre Ríos rechazaron las declaraciones del presidente Milei en Davos
A través de un comunicado enviado a Concordia Policiales, los jueces y las juezas que integran la Asociación Civil de Magistrados y Funcionarios de la Justicia de Faltas de Entre Ríos, rechazaron las declaraciones del presidente Javier Milei en el Foro Económico Mundial de Davos (Suiza).
El comunicado dice lo siguiente:
Los Jueces y las Juezas que integramos la Asociación Civil de Magistrados y Funcionarios de la Justicia de Faltas de Entre Ríos, hacemos público nuestro más enérgico rechazo a cualquier discurso que fomente el odio y la discriminación.
Creemos, con convicción, que la única forma posible de convivencia es brindando a cada miembro de esta sociedad el respeto para vivir con libertad, dignidad y amor. Fundamentalmente, la libertad, término utilizado recurrentemente en discursos políticos, debería ser consagrada tanto en los derechos que deben ser promovidos como en el respeto por los derechos ya adquiridos. Sin embargo, desde el poder central se adopta una postura manifiestamente anti-democrática y totalitaria cuando se trata de la consagración y el respeto de dichos derechos.
Nos solidarizamos con los colectivos y las minorías agraviadas por el discurso del Presidente de la Nación durante la Conferencia de Davos, el 23 de enero del corriente. En dicha alocución, lejos de adoptarse una postura conciliadora, pacificadora y unificadora tanto para la sociedad de la Nación como para la comunidad internacional, el investido Jefe de Estado incurre en una peligrosa incitación a la violencia, la discriminación y la intolerancia hacia determinados miembros de la sociedad mundial.
Desde nuestra función hemos sido testigos de cómo, a lo largo de los años, la violencia, la intolerancia y la falta de empatía han ido en aumento. No obstante, hemos advertido un crecimiento exponencial y sin precedentes de esta violencia entre ciudadanos, a partir de que desde el poder central se emite un discurso cargado de prejuicios y amenazas a ciertos sectores de la sociedad. Esto pone de manifiesto que es una responsabilidad fundamental de quien ocupa un cargo tan importante como el de presidir los destinos de una Nación: pacificar, no dividir; tolerar, no atacar; comprender, no desconocer. Y, principalmente, no infundir discursos plagados de datos falsos que solo estigmatizan a conciudadanos, lo cual incrementa la intolerancia de un lado y el resentimiento de quienes se sienten atacados injustamente del otro.
Hacemos un llamado desde lo institucional a los distintos estamentos estatales y no estatales a fijar una firme posición ante hechos de semejante gravedad. Es imperativo que se ponga fin a los sucesos que cultivan el odio sin sentido, con el fin de alcanzar el objetivo de vivir en sociedades más pacíficas y hermanadas.